El peligro no es la Navidad: son ellos
Cada año, cuando se acerca diciembre, los mismos titulares se repiten con la precisión de un reloj roto: “Las víctimas de violencia de género corren mayor peligro durante las fiestas”, “Las tensiones familiares aumentan el riesgo”, “Hay que estar alerta”. Y, una vez más, el foco se desvía hacia las mujeres, hacia su entorno, hacia la familia, hacia el clima festivo… hacia todo y todos, menos hacia los agresores. Alertar del “peligro del periodo navideño”, no hace sino reforzar una narrativa institucional que, aunque disfrazada de prevención, sigue reproduciendo el mismo patrón de culpabilización encubierta. Porque cuando se habla del “peligro de la Navidad”, del “peligro de las fiestas” o del “peligro de las discusiones familiares”, se borra al verdadero peligro: el maltratador. No es el villancico, es el violento La Navidad no mata. Las luces no golpean. Los turrones no controlan el móvil de nadie. Los niños [...]









