En esta memoria se recoge un año de trabajo en el que hemos tejido una red sólida de apoyo y empoderamiento de mujeres y menores víctimas de violencia machista.
Hemos desarrollado desde cursos y actividades hasta talleres de autoafirmación o terapéuticos, intentando aportar a las víctimas y su entorno caminos hacia la reconstrucción personal y colectiva.
Las ponencias y eventos no solo inspiraron, sino que también educaron. Nos sentimos muy orgullosas por haber compartido conocimientos sobre la prevención de la violencia de género en colaboración con expertos y grandes profesionales. Nuestra voz resonó en conferencias, ponencias así como en los medios de comunicación nacionales, autonómicos y locales
En cuanto al balance contable, gestionamos de manera transparente los recursos para atender las necesidades de las víctimas que han llegado a nosotras. Cada donación se tradujo en programas efectivos, servicios mejorados y un mayor alcance comunitario.
Esta memoria anual refleja no solo lo que hemos logrado, sino también la determinación de seguir adelante a pesar de las dificultades.
